El salmonete:

 

En Octubre ha comenzado la temporada del “salmonete”. Aunque lo encontramos casi todo el año, es entre septiembre y diciembre cuando abundan más los ejemplares y lo podemos adquirir en el mercado a mejor precio. 

Ahora vamos a descubrir algunos secretos de este pescado, ¿a que no sabías que a medida que va acercándose su muerte va cambiando de color hacia unas tonalidades más fuertes y más intensas?  Esa y otras muchas cualidades se esconden detrás de este pescado anaranjado.

 

¿Sabías qué?
 
El salmonete un pescado milenario
 
Hay dos tipos de salmonete muy conocidos: El salmonete de roca y el salmonete de fango, y multitud de variedades y subespecies. Habitan en las aguas del océano Atlántico, desde las Islas Británicas hasta Senegal, las Islas Canarias y las Azores. Y, por supuesto, también en el Mediterráneo, donde ya lo conocían en la Antigüedad: los griegos y los romanos. Su nombre procede del latín, “salmo”, (y salmonete significa “pequeño salmón”).
 
 
El de fango, como su propio nombre indica, habita en fondos blandos de arena y limo, mientras que el salmonete de roca se halla en fondos rocosos. Ambos se sitúan a una profundidad de entre 100 y 300 metros, a mayor profundidad se encuentran los de fango y los de roca algo más cerca de la superficie. Y allí coexisten con los salmones de fango más jovenes.
 
 
Apariencia:
 
Posee un morro truncado y de sus mandíbulas cuelgan dos largos barbillones, y es con estos órganos táctiles y gustativos con los que detecta a sus presas.
 
Su color varía en función de la profundidad y de la época del año, oscilando entre el marrón y el rojo. El de roca tiene una línea oscura desde el ojo hasta la cola y varias líneas amarillas que la atraviesan, mientras que el salmonete de fango es liso. 
 
 
Cómo se pesca:
 
El salmonete llega a los puertos capturado por barcos de arrastre, aunque la flota de artes menores, trasmallos y nasas también nos lo trae del mar a la mesa.
 
 
Este tipo de arte consiste básicamente en un gran saco de malla con forma de embudo, dividido en dos mitades. El tamaño de la malla va decreciendo desde la boca de la red hasta el copo, que es por donde se cierra el embudo para acumular las capturas.
 
 
No hay que olvidar, como ya se ha dicho muchas veces, que el arrastre es la modalidad de pesca más regulada en todo el caladero nacional, con muchas especificidades según las variaciones que presenta el litoral. Desde el grosor del cordón que forma la malla (torzal), el tamaño de la luz de malla, su forma romboidal o cuadrada, su longitud, las profundidades donde se puede calar el arte y las zonas de pesca donde pueden faenar los barcos.
 
El salmonete se incluye dentro de los pescados semi-grasos. Posee casi 4 gramos de grasa por cada 100 gramos de porción comestible y contiene fósforo, potasio, magnesio, calcio, sodio y yodo.
 
Contiene todos los aminoácidos esenciales
 
Su contenido proteínico no es muy elevado, pero las proteínas que posee son consideradas de alto valor biológico porque contienen todos los aminoácidos esenciales. 
 
El salmonete es un pescado que abunda en el mar Mediterráneo, por lo que las comunidades bañadas por él son las que más aprecian este pescado y por tanto, las que más lo incluyen en sus platos populares. 
 
La carne de este pescado es firme, blanca y de un excelente sabor. Se consume entero y cocinado, tanto a la plancha como asado o frito, pero siempre tras eliminar sus agallas y sus escamas.
 
 
Propio de los meses más fríos previos a la entrada del invierno os proponemos entrar en calor preparando una crema de calabaza y salmonete que Petit Chef nos explica en su página web: 

 Aquí os la explicamos: 

 

Ingredientes:

Para algo más de un litro de crema...

2 salmonetes frescos enteros (también se pueden usar los restos límpios de ´Pecaito de Juandolio´)

450 gramos de calabaza

Agua

1 rama de apio

1 puerro entero

2 dientes de ajo

1 cucharadita de cúrcuma

1/2 cucharadita de orégano molido

Pimienta y sal al gusto

1 chorrito de leche evaporada (dos cucharadas)

cebolla frita (para servir)

 

Preparación:

Paso 1:

Primero pelamos, cortamos y ponemos a cocer la calabaza en más o menos un litro de agua con sal y unas ramas de apio 

Aparte, en una sarten con dos cucharadas de aceite, sofreímos los salmonetes. Cuando estén listos, retiramos de la sarten y reservamos. En la misma sartén, sofreimos un par de ajetes machacados, añadimos las colas y cabezas del pescado frito. Echamos un chorro de agua de la cocción de la calabaza, una cucharadita de cúrcuma y dejamos cocer tapado a fuego lento 20 minutos.

 

Paso 2:

Trituramos la calabaza cocida junto a su agua de cocción y volvemos a dejar en el fuego a mínima temperatura

 

Paso 3:

Volvemos a los salmonetes. Colamos el líquido de la cocción de colas y cabezas y desechamos los restos. 

Aparte, limpiamos la carne de espinas del pescado sofrito y reservamos la carne limpia.

 

Paso 4:

En la sartén sofreimos la parte blanca del puerro y los ajos, cuando empiece a coger color, lo incorporamos junto con el caldo de pescado reservado al pure de calabaza que aún tenemos en el fuego. Comprobamos de sal y pimienta, dejamos cocer 5 minutos. Rectificamos de sal, ponemos perejil, un chorrito de leche evaporada (dos cucharadas) dejamos dos minutos a fuego bajo. Echamos los trozos enteros y limpios de carne de pescado, mezclamos, apagamos el fuego y dejamos reposar 5 minutos.

Paso 5: Servir con un poco de cebolla frita por encima. 

 

 

Ya se va el Bonito... Cepesca Oct 07, 2014 - 22:00

Termina Septiembre, se va el verano, se va el calor… y con ello termina la Costera del Bonito. Y hoy le vamos a dedicar unas palabras a este pescado rico en Omega-3, Vitamina A y Vitamina D, que además es muy rico en sabor. Su consumo siempre está en pleno auge en verano, y es que es cuando salen nuestros barcos a pescarlos, nos lo traen fresco para que no pierda sus propiedades nutritivas.

Cada año por el mes junio zarpan los barcos de Galicia, Cantabria, Asturias y País Vasco para la captura del gran bonito del Norte. En la imagen, se ve un Bonitero de Burela, Lugo. Esta especie se captura con diferentes artes: cañeros o al curricán, palangreros y cerqueros. 

Palangre:

 

Cerquero:

 

No está siendo una mala costera la de este año, indica el sector. Los primeros picos en cuanto a los precios se marcaron en la primera llegada, aunque sus cotizaciones en primera venta rondan los 4 euros de media. 

Sabías qué...

El bonito del norte es denominado también atún blanco. Lo que conocemos como “bonito del norte” es una de las especies de atunes más consumidas habitualmente. Su nombre científico es Thunnus alalunga. Y el nombre de atún blanco viene porque su interior se mantiene de ese color. 

El bonito del Norte no vive en el Norte

Vive durante el invierno en las aguas próximas a las Azores y de desplaza a finales de la primavera (Mayo o junio) al Mar Cantábrico. Es durante estas migraciones cuando se inicia la campaña del bonito que acaba generalmente en Septiembre.

El bonito más grande del mundo ha sido pescado en las Azores. El bonito crece hasta 75 cm y suele pesar más de 4 kilos. La media ronda entre los 10 y 30 kilos. Obviamente esto es una media y los hay incluso superiores.

Uno de los artes de pesca con que se captura es el Palangre de Superficie, uno de los más selectivos que existen, ya que utiliza anzuelos cebados de distintos tamaños en función de la especie a la que se dirige.

En el caso del bonito del norte se pesca con anzuelo uno a uno y como ya hemos dicho pesa más de 4 kg.

En términos generales este tipo de pesca consiste en una línea principal, que trabaja paralela a la superficie, a la que se amarran muchos ramales o brazoladas dotados de un anzuelo cebado en el extremo libre.

Cuando los peces aparecen agrupados en apretados cardúmenes se pesca a caña, anzuelo con cebo vivo y curricán. El primero es el arte tradicional de la Cornisa Cantábrica.

En cualquier caso, el modo de operar siempre es el mismo: se larga el aparejo por la popa, a mayor o menor velocidad y se recoge, siempre por un costado.

Anatomía del bonito:

Posee un cuerpo esbelto y alargado, algo comprimido. Incluso se dice que tiene forma de torpedo, lo que le permite ir a gran velocidad, llega a alcanzar los 80 kilómetros hora. Se caracteriza por su enorme boca, con dientes cónicos y pequeños, así como por sus ojos grandes y redondos.

A diferencia de otras especies de peces, sus branquias no le permiten bombear todo el oxígeno que debiera y por ese motivo necesita abrir la boca muchas veces para respirar.

La diferencia entre el bonito y el atún radica principalmente en la longitud de la aleta pectoral, que es bastante más larga en el bonito, y además éste tiene unas rayas oblicuas de color oscuro a ambos lados de la zona dorsal.

El bonito, además, es un pez carnívoro que se alimenta de otros peces de menor tamaño, como el jurel, sardinas, anchoas, incluso calamares… en definitiva, de peces pelágicos que nadan en aguas superficiales.

Su forma de proceder es atacar todos juntos. Al tener dientes les es más fácil comerse a sus presas. Llegan a comer el 25 % de su peso todos los días. Sus peores enemigos son los tiburones, atunes o peces espada (es decir, las especies de mayor tamaño).

Normativa:

Para poner una cuota al bonito se estipula que se sigan las recomendaciones de la ICCAT (La Comisión Internacional para la Conservación del Atún Atlántico). La última reunión de ésta tuvo lugar en noviembre del 2013 en Ciudad del Cabo (Sudáfrica), fijando un TAC global de 28.000 toneladas, de las que 13.700 corresponden a España, para los años 2014 y 2015.

Seguro que ahora le apetece probar un buen bonito…. Qué mejor que una receta de las nuestras.


Receta de Hoy:  Cebiche de Bonito con salsa rosa

Hoy vamos a preparar algo sencillo para quedar bien delante de todo el mundo. La receta es de Arguiñano y la verdad es que ahora está de moda en cualquier concurso de cocina: El cebiche.

Ingredientes:

500 gramos de bonito

4 patatas 

1 lima

1cebolleta

1 huevo

4 rodajas de guindilla o cayena

1 cucharada de mostaza

1 vaso de zumo de naranja

medio vaso de lima

3 cucharadas de whisky

unas gotas salsa picante

unas gotas salsa inglesa

3 cucharadas de ketchup

Aceite de Oliva Virgen Extra

Vinagre

Sal

Pimienta

Perejil

 (y si eso Cebollino picado)

Elaboración:

Empezamos la receta de Cebiche de Bonito con salsa rosa: corta el bonito en trocitos, como si fueran taquitos. les añades sal y pimienta,

Los añades en un Bol.

Picas la cebolleta y le añades un poco de zumo de naranja ( que te sobre que era un vaso) y un poco del de lima. Incorpora las rodajas de guindilla y mezclalo todo bien para que el bonito quede bien impregnado.

Cubrelo con papel film y lo dejas media hora (30 minutos) en la nevera (déjalo macerando).

Mientras vamos a hacer la salsa rosa: pones el huevo crudo en la batidora, agregas unas gotas de vinagre y le echas sal. Luego añades 150 mililitros de Aceite de Oliva Virgen Extra. 

El TRUCO de la mayonesa: introduces el brazo de la batidora hasta el fondo y cuando empiece a emulsionar realiza movimientos ascendentes y descendentes muy suavemente hasta que quede bien ligada. Añades las tres cucharaditas de Ketchup, 3 cucharaditas de Whisky, una cucharada de mostaza, unas gotitas de salsa picante y salsa inglesa, y ahora es el momento de usar el resto del vaso del zumo de naranja que te sobró. Mezcla bien y reserva la salsa rosa, tiene que quedar suavita (ligera).

Pela las patatas, las cortas en lonchas gruesas y las fríes en una sartén. Cuando termines las pones en el fondo del plato (de cama), les echas sal y espolvoreas el perejil picado. Pones encima el bol del bonito y luego le añades la salsa. 

El último paso para que tus invitados jamás se olviden de tu plato, es espolvorear cebollino picado y ya decorar con una ramita de perejil.

Digno merecedor de concurso. ¡Que lo disfruten!